En un mundo de más de 7 millones de habitantes se hace cada vez más importante desarrollar conciencia global sobre cómo se relacionan los seres vivos con su medio ambiente. Por esta razón, días como el 1 de noviembre donde se celebra el Día Mundial de la Ecología son claves para mirar nuestra relación con el medio ambiente y concientizar nuestras interacciones con la naturaleza en la cotidianidad.

   

Los Ecólogos son las personas responsables de estudiar los seres vivos como habitantes de un medio y las interrelaciones que mantiene entre sí y con el propio medio. Desde la Ecología se desarrolla una mirada sistémica desde donde se distingue cómo la desaparición de una especie distorsiona la relación entre los seres vivos y su medio y cómo se afectan los componentes entre sí.

Para analizar los temas que ocupan a la sociedad actual como la desertización, erosión de terrenos, destrucción de la biodiversidad, contaminación del aire, suelo y agua, etc., la Ecología se toma de distintas disciplinas como la genética, botánica, química, geología para el análisis global de variables y consecuencias que se desarrollan en esta interacción.

Sin embargo, más allá de la mirada científica lo relevante está en la conciencia ciudadana que se desarrolle acerca de cómo mejorar la calidad de vida y de cómo respetar-nos en la convivencia en comunidad con nuestro medio que nos hace posible, el medio ambiente.

¿Cuáles son algunas de las malas prácticas ambientales en la cotidianidad que afectan la ecología?

-Lanzar al suelo colillas de cigarro.

-Botar bolsas de plásticos.

-Botar botellas.

-Tirar a la basura teléfonos móviles (es mejor llevarlos a un punto de reciclaje).

-No reciclar.

-Abusar de transportes con combustibles agresivos como el petróleo.

-Largas duchas de baño.